Indignada con los indignados.

Es la primera y última vez que puedo decir que me avergüenzo de ser catalana. Y no por ideología, porque realmente me siento catalana y es de las cosas que más orgullosa me hace sentir. Pero lo que ha sucedido hoy en el Parlement de Catalunya no tiene nombre ni tiene nada. 

Hace unos días publiqué un comentario en este mismo blog defendiendo y animando a la gente a manifestarse con la famosa acampada. Pues bien, creo que los "indignados" de Barcelona, por así decirlo, deberían aprender de otras ciudades lo que es el civismo. Recalco lo de "indignados" porque más bien son antisistemas, ni-ni's (ni estudias ni trabajas) y perroflautas. Plaza Catalunya ha pasado de ser un punto de encuentro turístico con flores a un huerto de tomates. 

Pues bien, vamos a decir las cosas por su nombre. Trabajo si que hay, pero no el que vosotros queréis: trabajar poco y cobrar mucho. Buscarlo. Trabajar de lo primero que os pase por delante y tenga cierto encanto para vosotros. Hacer cursos de formación. No esperéis que os llueva dinero con un simple chasquido de dedos. No esperéis ser ni grandes periodistas de un día al otro, ni grandes empresarios, ni grandes constructores. ...

...y dejaros de abuchear, insultar y aporrear a los diputados y autoridades si no queréis pasaros 5 años de vuestras vidas entre rejas. 

Dicho esto, espero que el concepto de "catalán" no se base en la imagen de estos "indignados" sin educación.

Lo siento, pero así lo veo. 

PD: Bonita escultura "Desconsol, de Llimona", la escultura que yace en medio del estaño del Parlament de Cataluña. Es que paso de poner una foto de incivismo. 

L.